El presidente francés, Emmanuel Macron, recibio este miércoles en esta capital al mandatario interino de Siria, Ahmed Al-Shara, en su primer viaje a Europa, una visita que genera polémica por su pasado y los ataques contra minorías.
Aunque la Presidencia anfitriona asegura que no habrá complacencia con el visitante, abundan las críticas a pocas horas del encuentro y de una rueda de prensa conjunta, en particular provenientes desde la derecha y la extrema derecha.
Para la líder de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, acoger a Al-Shara, identificado como un antiguo yihadista, constituye una provocación inútil, que podría inquietar a los aliados de París.
Estupor y consternación, dijo Le Pen en la Asamblea Nacional, donde recordó el pasado de la principal figura de la organización Hayat Tahrir al-Sham (HTS), en el poder desde el derrocamiento en diciembre del entonces jefe de Estado, Bashar al-Assad, una caída celebrada por el gobierno francés.
Por su parte, el dirigente conservador Laurent Wauquiez, del partido Los Republicanos, tildó de un duro error y un escándalo la decisión de Macron de recibir a Al-Shara.
El gobierno interino de Siria es blanco de denuncias y acusaciones por las atrocidades perpetradas contra civiles por cuestiones de fe y prisioneros en las norteñas provincias de Tartús, Latakia y Homs, en medio de ataques contra las minorías alauita y drusa, interpretados como la prevalencia de extremistas dentro de las nuevas autoridades.
París condenó estas acciones y demandó investigaciones independientes que arrojen luz sobre lo ocurrido y los responsables, para que sean procesados por la justicia.
También desde la izquierda se realizaron cuestionamientos a la visita, como el diputado de La Francia Insumisa Bastien Lachaud, quien reclamó al presidente firmeza y exigencia de respeto a los derechos de las minorías y a una rápida transición en Siria.
De acuerdo con el Elíseo, el objetivo de recibir al líder interino es mostrar el respaldo de Francia “a la construcción de una nueva Siria, libre, estable, soberana y respetuosa de todos los componentes de su sociedad”.
Las nuevas autoridades sirias reclaman la salida de HTS de las listas de grupos terroristas en organismos internacionales y gobiernos como los de EEUU y algunos europeos, un reclamo que se espera de Al-Shara en Francia.
El canciller de Francia, Jean-Noël Barrot, y la ministra de Asuntos Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, estuvieron en enero en Siria, donde conversaron con el mandatario interino.
Después de esa visita, Barrot aseveró que Francia juzgará a las autoridades en el poder por sus actos y por el respeto a todas las comunidades, de manera que se desarrolle un proceso que preserve el pluralismo religioso y étnico de la nación, como clave para prevenir la división y la violencia.
No otorgaremos “un cheque en blanco” al nuevo régimen y lo juzgaremos por sus actos, insistió.
Source: Prensa Latina