Avi Ashkenazi, corresponsal para el norte y asuntos militares del periódico israelí Maariv, reconoció que ““Israel” está volviendo a cometer los graves errores que cometió en el pasado, a la luz del shock por la ausencia de defensa militar el 7 de octubre”.
Ashkenazi subrayó que “Israel” está ahora “en el camino de volver a ahogarse en el atolladero libanés, 25 años después de que fue capaz de salvarse de él”.
Admitió que “Israel no tiene estrategia”, explicando que “funciona como un parque de bomberos; el ejército y la dirigencia política están ocupados apagando incendios, no construyendo medidas a largo plazo. Esto sucede en el norte, y lo mismo sucede en Gaza, y también en el tercer círculo (es decir, Irán)”.
Se dio cuenta de que el “ejército” que “Israel” había construido requería un presupuesto enorme y sobrecargaba sus recursos, lo que condujo a la mayor crisis económica de los años ochenta (del siglo pasado), que los economistas describieron más tarde como “la década perdida de la economía israelí”. Entró en el Líbano en 1982 y se quedó atrapado allí durante 18 años.
“El ejército construyó dos cinturones de seguridad en el Líbano, pero pronto se hizo evidente que el cinturón de seguridad, que estaba destinado a proteger los asentamientos del norte, se había convertido en una trampa para los soldados que servían en esas posiciones. Tal vez pudimos olvidar el desastre de Safari (la operación de los mártires Amer Kalakash en Maryayun que mató a 12 soldados en un convoy), el desastre de Saluki, el desastre de Shayetet, el desastre del helicóptero, el desastre del vehículo, etcétera”, añadió.
Ashkenazi admitió que “la sangre de “Israel” se derramó durante 18 años en el Líbano sin ningún objetivo real”, y ahora se están repitiendo los mismos errores.
Subrayó que “es un error restablecer los lugares que el ejército israelí abandonó hace 25 años, y muchas madres y padres llorarán por ello. No tiene lógica mantener los lugares de Karkum (Balat), Shaked, Tzfon y otros”.
Añadió: “El ejército no supo cómo proporcionar una sensación de seguridad a los residentes. Esto, por cierto, no lo hacen estableciendo posiciones en un pantano. Lo hacen en un momento de prueba. Por ejemplo, el 7 de octubre.”
Source: Al Mayadeen