Las fuerzas de ocupación israelíes detuvieron el miércoles a ocho palestinos en el curso de la actual agresión contra la ciudad de Tammun, al sur de la ciudad de Tubas, en el norte de Cisjordania ocupada, según la Sociedad de Prisioneros Palestinos (PPS).
Kamal Bani Odeh, director de la oficina de la PPS en Tubas, dijo que las fuerzas de ocupación detuvieron a ocho residentes de la ciudad desde las primeras horas de la mañana.
Añadió que los soldados armados seguían realizando redadas casa por casa en la ciudad, arrestando a civiles y sometiéndolos a interrogatorios.
El Ejército de ocupación sionista anunció el miércoles que expulsó a unos dos mil residentes del campo de Tulkarem, durante la actual ofensiva en el norte de Cisjordania.
Las fuerzas de ocupación han continuado con un ataque masivo contra la ciudad de Tammun y el campamento de refugiados de Al-Faraa por cuarto día consecutivo, manteniendo un asedio estricto y provocando escasez de agua y falta de suministros esenciales como productos infantiles, pañales y medicamentos.
Los israelíes arrasaron deliberadamente la infraestructura, destruyendo las principales tuberías de agua, lo que provocó una escasez de agua y causó un corte de energía en partes de la ciudad y el campo.
El ataque se produce mientras las fuerzas de ocupación continúan librando agresiones a gran escala en la ciudad y el campo de Yenín, así como en la ciudad y el campo de refugiados de Tulkarem.
Esto ocurre mientras las fuerzas de ocupación endurecieron las medidas militares en toda la Cisjordania ocupada horas después de la liberación de 90 prisioneros palestinos como parte del alto el fuego en Gaza que entró en vigor, aislando ciudades y gobernaciones unas de otras utilizando puestos militares, barreras y bloques de hormigón.
Las medidas militares israelíes se producen en paralelo a los ataques en curso de los colonos israelíes en toda Cisjordania para aterrorizar a los palestinos y desplazarlos de sus tierras con el fin de apoderarse de ellas y construir colonias judías ilegales que separan a las comunidades palestinas.
Los cierres, además de otras medidas adoptadas bajo el pretexto de la seguridad, tienen por objeto consolidar la ocupación militar israelí de Cisjordania, que lleva ya 58 años, y su proyecto colonial de asentamientos, que aplica mediante una violencia sistemática y a menudo mortal contra los palestinos.
Source: Al Manar