Starbucks Corporation, la famosa cadena multinacional estadounidense de cafeterías, ha cerrado su sucursal en la zona de Raouche de Beirut, tras el cierre previo de su local en el centro comercial ABC Verdun. Estos cierres, que dejan a ambas zonas clave sin la presencia de Starbucks, ponen de relieve una notable disminución de la presencia de la empresa en el mercado libanés.
Un agente de seguridad de la sucursal de Raouche confirmó que el espacio pronto será ocupado por una nueva marca de café.
Declive global y dificultades financieras
Los cierres se producen en medio de una caída global de las ventas de Starbucks, a pesar de los esfuerzos por implementar cambios administrativos destinados a mejorar el rendimiento. De manera similar, Americana Restaurants, un importante operador de servicios de alimentación, anunció una caída del 48,2% en las ganancias durante el año pasado, lo que refleja las dificultades financieras más amplias que enfrentan las empresas que han sido objeto de campañas de boicot populares.
Los boicots como una poderosa herramienta de resistencia
La Sra. Afifa Karaki, una destacada activista del movimiento de boicot contra las empresas vinculadas a la ocupación, subrayó la creciente importancia de los boicots populares. En declaraciones a Al-Manar, afirmó: “Nuestra oposición al colonialismo es una postura de principios y una batalla en curso que solo terminará con la erradicación de esta entidad colonial”.
La Sra. Karaki hizo referencia a los recientes informes económicos israelíes que advierten de un “colapso en espiral”, citando la salida de más de 40.000 empresas del mercado israelí y la suspensión de numerosos proyectos. Argumentó que el continuo apoyo corporativo mundial a la economía sionista equivale a un “soporte vital artificial para un sistema moribundo”.
“Los boicots no son simplemente una herramienta económica; encarnan el rechazo popular generalizado de cualquier forma de normalización o apoyo a la ocupación”, añadió.
Resultados tangibles de las campañas de boicot
La Sra. Karaki destacó el impacto tangible de los boicots económicos mundiales en la reducción del apoyo a la ocupación. Por ejemplo, señaló que Puma puso fin a su patrocinio de la Asociación de Fútbol de “Israel” después de los esfuerzos sostenidos de boicot.
También aseguró que las economías locales pueden seguir siendo resistentes, ya que los inversores nacionales son capaces de encontrar alternativas que fortalezcan los mercados locales sin apoyar a las entidades cómplices de la violencia y la opresión.
Llamamiento a intensificar los esfuerzos de boicot
La Sra. Karaki concluyó instando a que se hagan mayores esfuerzos para apoyar las campañas de boicot. Hizo hincapié en que “los boicots son una forma vital de resistencia, no menos importante que cualquier otra forma de lucha”. Hizo un llamamiento a una mayor conciencia pública y un mayor apoyo comunitario para desafiar a los sistemas y las empresas que, directa o indirectamente, facilitan la ocupación.
Source: Al Manar
