Honduras extendió el viernes el estado de emergencia existente en el país, que suspende algunos derechos constitucionales, para hacer frente a las pandillas violentas dentro del país.
Ordenada por la presidenta Xiomara Castro, en respuesta a la actividad de varias grandes organizaciones criminales, la prórroga del estado de emergencia es la tercera de este tipo que se extenderá por otros 45 días hasta el 21 de mayo.
El estado de emergencia ha permitido a las autoridades y la policía realizar detenciones sin órdenes judiciales y mantener a los sospechosos en detención preventiva.
“Esta medida legal ha hecho posible que las autoridades de seguridad capturen a más de un centenar de miembros de organizaciones criminales”, dijo el gobierno en un comunicado.
El estado de emergencia también permite a las autoridades suspender parcialmente los derechos constitucionales en las zonas afectadas, mientras se ha incrementado la seguridad en los barrios de menores ingresos.
Según las autoridades, las pandillas han llevado a cabo extensas campañas de extorsión contra empresas, transportistas y organizaciones no gubernamentales (ONG), empleando la violencia contra entidades que no pagan dinero por protección.
Pandillas como la MS-13 y Barrio 18 tienen una amplia presencia en toda Centroamérica y, según los informes, la violencia de las pandillas es más alta en Tegucigalpa y San Pedro Sula.
Previamente, Castro había ordenado desplegar soldados en todo el país para combatir a los grupos criminales violentos.
Source: Agencias