En EEUU, dos días después de la adopción de una ley que autoriza a las familias de las víctimas de los atentados del 11-S de 2001 a demandar a los patrocinadores de los actos de terrorismo en suelo de EEUU, en este caso Arabia Saudí, una primera familia ha presentado su demanda.
Las familias quieren aprovechar así estas semanas o meses que todavía tienen que transcurrir antes de que el Congreso de EEUU pueda vaciar de contenido la ley y presentar sus demandas de forma que no se ven afectadas por los posibles cambios.
La Sra. Madame Stephanie Ross DeSimone, cuyo esposo murió en los atentados del 11-S, presentó el viernes 30 de septiembre su demanda en un tribunal de Washington.
Stephanie Ross DeSimone, que estaba embarazada cuando su marido fue muerto en el edificio del Pentágono, reclama los daños y perjuicios que ella sufrió tras la muerte de su marido, incluyendo los daños psicológicos.
Otras demandas están en proceso de ser interpuestas, ya que, según el Wall Street Journal, los abogados no van a esperar hasta que el Congreso pueda cambiar la ley. Un abogado de Nueva York predijo “las mayores demandas de la historia de EEUU o del mundo”.
La interposición de la demanda fue posible por la aprobación por una mayoría aplastante de diputados del Senado y la Cámara de Representantes a una ley que autoriza a las familias de los atentados del 11-S a demandar a Arabia Saudí.
Esta ley conocida como Acta de Justicia Contra los Patrocinadores del Terrorismo (JASTA) hace alusión directamente al régimen saudí y permite también el posible procesamiento de dirigentes saudíes implicados en la trama del 11-S.
Arabia Saudí ha advertido que venderá sus bonos del Tesoro norteamericano por valor de 750.000 millones de dólares y otros activos que posee en EEUU si las demandas van adelante ante los tribunales estadounidenses.
Source: Agencias