Según los medios israelíes, una de las principales autopistas que discurren desde Haifa, una de las principales ciudades de la entidad sionista, quedó bloqueada por una fuga de amoniaco provocando el pánico en las poblaciones cercanas y la evacuación de varios edificios militares en los alrededores.
Grandes fábricas de producción y de tratamiento de gas tóxico se encuentran en Haifa, y ellas podrían constituir objetivos de Hezbolá si Israel decide atacar al Líbano.
Según el periódico israelí Yediot Aharanot, la fuga de amoniaco se produjo a partir de un camión cisterna de 2.000 litros, lo que llevó a las fuerzas de seguridad a bloquear totalmente la autopista. La fuga continúa pero la zona afectada por ella es muy pequeña y, por consiguiente, no afecta por el momento a los habitantes de Haifa.
El secretario general de Hezbolá anunció en 2016 la determinación de su movimiento a atacar los depósitos de amoniaco del puerto de Haifa si Israel agrede al Líbano.
Esta anuncio provocó el pánico en Haifa y empujó a un tribunal de la ciudad a exigir a la compañía que posee las reservas que las desmantelara. Unos 700.000 israelíes viven en Haifa. Las autoridades israelíes buscan ahora transferir dichas reservas a otra parte para “evitar una catástrofe”, pero ninguna ciudad israelí ha aceptado recibirlas. Algunas fuentes han hablado de transferirlas al Desierto del Neguev, donde vive un número menor de israelíes. Aún así el derrame de muchos miles de litros en tal zona provocaría consecuencias nefastas para la entidad sionista.
Además, los barcos que transportan amoniaco siguen atracando en Haifa y la destrucción de uno de ellos, cargado de este producto, equivaldría a cinco bombas nucleares, señaló el secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá, en su discurso el pasado jueves.
Cabe señalar que si un pequeño derrame de amoniaco en un camión ha causado una oleada de pánico entre los israelíes, no es difícil adivinar cuáles podrían ser los resultados, tanto materiales como morales, de un ataque masivo contra las grandes reservas de amoniaco de la entidad sionista o contra la central nuclear de Dimona, en caso de una agresión israelí contra el Líbano.
Source: Yediot Aharanot