Medios como las agencias SANA y la rusa Sputnik, insisten en que los grupos terroristas preparan una provocación de ataque químico desde la provincia de Idleb, último bastión organizado que aún tienen en Siria.
Sobre la base de fuentes locales, que por supuesto solicitaron el anonimato, expertos extranjeros, entre ellos belgas y franceses, supervisaron la preparación de al menos 120 cohetes cargados con sustancias altamente tóxicas.
Los datos precisan que los proyectiles modificados con ese fin fueron trasladados hacia localidades del sur de Idleb colindantes con Latakia y Hama, donde se pusieron a disposición de los grupos Jaish Al Islam, Hurredine Al Din y del Partido Islámico del Turkestán, este último integrado por mercenarios de la etnia china de los uigures.
De acuerdo con los reportes, de las operaciones se encargaron además integrantes de los llamados Cascos Blancos, asiduos colaboradores del otrora frente Al Nusra, ahora Junta para la Liberación del Levante, al cual se subordinan los grupos mencionados.
El objetivo es montar una escenificación de un presunto ataque químico y culpar al Ejército sirio o a los efectivos de Rusia que supervisan las áreas mencionadas, comprendidas en la zona de distensión nunca respetada por los terroristas.
Tanto Rusia como Siria reiteran que tales maniobras tratan de repetir las provocaciones con ataques químicos realizados anteriormente en Duma, cerca de Damasco y en Alepo, entre otras.
Source: PL