En lo que parece ser el comienzo de un desafío al gobierno del príncipe heredero Mohammed bin Salman, su tío exiliado, el príncipe Ahmed bin Abdulaziz, ha regresado a Arabia Saudí desde el Reino Unido esta semana.
El príncipe Ahmed, el hermano menor del rey Salman, calificó a su sobrino de “tóxico” tras el asesinato del periodista Yamal Khashoggi, y las fuentes saudíes dicen que pretende volver para desafiar al príncipe heredero por ese motivo.
Los informes afirman la existencia de algún tipo de “entendimiento” en relación al regreso del príncipe Ahmed, pero no conocen los pormenores. Al parecer, él buscó garantías de su hermano, el rey, de que podía regresar sin temor por su seguridad.
Incluso con tal garantía, parece una aventura extremadamente arriesgada, ya que al propio Khashoggi se le ofrecieron repetidas veces garantías de un regreso seguro desde el exilio antes de su repentino asesinato y desmembramiento por parte de miembros de los servicios de seguridad saudíes.
El príncipe saudí Jalid bin Farhan al Saúd predijo recientemente que la familia real en Arabia Saudí recurriría al rey Salman bin Abdul Aziz en lo que parece ser el inicio de un desafío al poder del príncipe heredero MBS.
El pasado lunes, un reportaje del canal de televisión francés France 24 citó al miembro de la familia real Jaid bin Farhan, que señaló que “los miembros de la familia real hacen frente a una amenaza existencial y ellos aislarán al rey y a su hijo”.
Él añadió que “Mohammed bin Salman no controla el estado profundo y su juventud no le permite conocer mucho sobre él. Existen príncipes que mantienen muy buenas relaciones con los jefes de los servicios de seguridad y que tienen la capacidad de perpetrar un golpe de palacio”.
Por su parte, el periódico británico The Times señaló que el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman se ha creado enemigos poderosos dentro de la familia real y la élite financiera.
El periódico citó a una fuente occidental que señala que la familia de los Al Saúd se muestra muy irritada por toda la concentración del poder en manos de Bin Salman, lo que contrasta con la distribución de poder entre varias partes de la familia que existía anteriormente.
La fuente añadió: “MBS toma todas las decisiones de forma única, incluyendo las más serias en contrate con el sistema anterior de consenso dentro de la familia”.
Sobre el asesinato de Khashoggi en el consulado saudí en Estambul, Jalid bin Farhan acusó al príncipe heredero de la responsabilidad de su muerte. “Emitió órdenes, lo contactó antes de matarlo y pidió al equipo que lo asesinara y que lo cortara en trozos”, dijo.
“El régimen en Arabia Saudí ahora está muy centralizado, y el rey Salman se encuentra en un estado muy degradado, por lo que el príncipe heredero está a cargo del gobierno en el reino y ordenó la muerte de Khashoggi”.
Explicó que “el príncipe heredero no aceptó las críticas de Khashoggi contra él a pesar de la calma y la racionalidad mostrada por este último”.
El 20 de octubre, después de 18 días de silencio, Riad admitió la muerte de Khashoggi en el interior del consulado luego de una “pelea” y anunció el arresto de 18 saudíes para interrogarlos en el caso, mientras que el paradero del cuerpo de Khashoggi no fue revelado.
Source: Diversas