Un periódico alemán ha revelado que el régimen israelí transfirió en la noche del sábado a cientos de Cascos Blancos desde Siria a Jordania.
Según el periódico alemán Bild, que se desplegó en la frontera entre Siria y la Palestina ocupada, Israel evacuó a 800 Cascos Blancos y sus familias desde el Suroeste de Siria, donde el Ejército sirio lleva a cabo una ofensiva, a Jordania.
“Docenas de autobuses se dirigieron desde la frontera siria a Israel, bajo la vigilancia de la policía israelí y las fuerzas de la ONU”, escribió el periódico alemán.
El Ejército israelí anunció en una declaración que había participado en la operación, en vista del “peligro que amenaza la vida de estos civiles”.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Jordania, Mohammad al Qaed, confirmó esta noticia y dijo que la transferencia de estos individuos a su país se debió a “razones humanitarias”.
Estos Cascos Blancos deben ser transferidos desde Jordania a Canadá, Alemania y Gran Bretaña, manifestó Amman.
“Esta es una operación realizada a petición de EEUU y los países europeos”, dijo una declaración del Ejército israelí.
“El ejército y la policía israelíes acordonaron las carreteras secundarias. La evacuación fue planeada por una base militar israelí. Varios vehículos, incluidos minibuses, eran visibles en la oscuridad de la noche”, escribió Bild.
Israel ha tratado repetidamente a miembros de los Cascos Blancos heridos en hospitales del régimen.
Los Cascos Blancos fueron fundados en Turquía en 2013 por el ex oficial del servicio de inteligencia británico, el MI5, James Le Mesurier, con el apoyo financiero de EEUU.
Desde el inicio del grupo, sus miembros han sido desplegados en áreas bajo el control de terroristas opuestos al gobierno de Bashar al Assad y esto, por supuesto, ha puesto en duda la naturaleza humanitaria de sus actividades en territorio sirio.
Diplomáticos occidentales, bajo condición de anonimato, dijeron a CNN que los aliados de EEUU en la OTAN le habían recordado a Trump la necesidad de persuadir a Israel y Jordania para que permitieran que los Cascos Blancos huyeran de Siria a través de sus territorios.
En junio, el gobierno sirio condenó la donación de 6,6 millones de dólares de EEUU a estos terroristas vinculados al Frente al Nusra.
Los Cascos Blancos son acusados por el gobierno sirio y Rusia de llevar a cabo montajes con respecto a ataques químicos de falsa bandera reales o infundados para culpar de ellos a Damasco.
En Duma, ellos filmaron un vídeo donde se veía a individuos que echaban agua a niños fingiendo un ataque químico. Más tarde, estas supuestass “víctimas” que aparecían en el vídeo visitaron la sede de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
Los Cascos Blancos se presentan como una organización humanitaria a pesar de que tomaron parte en la lucha, especialmente en el corte del agua durante 42 días a los 5,6 millones de habitantes de Damasco. Muchos miembros del grupo son también miembros de Al Qaida o el Daesh. Ellos han participado en ejecuciones llevadas a cabo por esos grupos.
Los miembros del grupo evacuados por Israel serán recibidos no solo en el Reino Unido y Canadá, sino también en los Holanda y Alemania, agrega el periódico.
Source: Diverso