Berlín reaccionó a los comentarios polémicos de Donald Trump al margen de una cumbre de la OTAN en Bruselas, donde afirmó que Alemania era una “prisionera” de Rusia.
Tan pronto como llegó a Bruselas para asistir a una cumbre de la OTAN, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que Alemania era un país independiente que decide por sí mismo.
A este respecto, la ministra de Defensa alemana, Ursula von der Leyen, quien acompaña a Merkel a la cumbre, calificó las conversaciones con Moscú como “importantes”.
“No tengo idea de lo que quiso decir el presidente de EEUU, pero espero que vea en nuestra reacción una clara señal de nuestra voluntad”, dijo.
Ursula von der Leyen añadió que, al prestar atención al historial de la Canciller alemana, era fácil darse cuenta de que tenía contactos permanentes, desde hacía 13 años, con el presidente ruso.
“Aún quedan muchas preguntas por responder sobre Rusia y, para hacerlo, debemos continuar nuestras conversaciones con Moscú. Hablamos no solo con nuestros amigos, sino también con nuestros enemigos y rivales”, dijo.
En un desayuno con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, el miércoles 11 de julio, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que algunos países de la OTAN no estaban pagando lo que debían por el gasto militar.
También acusó a Alemania de ser una “prisionera” de Rusia. “Creo que es muy triste cuando Alemania hace un gran acuerdo de petróleo y gas con Rusia. Se supone que debemos protegerla contra Rusia, y Alemania sale y paga miles de millones de dólares al año a Rusia”, dijo Trump.
Trump había atacado previamente el gasoducto Nordstream-2 desde Rusia a Alemania a través del Mar Báltico, insistiendo en que Europa compre gas natural más caro de EEUU. El año pasado, incluso amenazó con imponer sanciones a firmas alemanas y austríacas involucradas en el proyecto Nordstream. El miércoles, Trump advirtió: “Alemania está totalmente controlada por Rusia, ya que obtendrán del 60 al 70 por ciento de su energía de Rusia y un nuevo gaseoducto”.
La cumbre de la OTAN de dos días se inauguró el miércoles en Bruselas en una atmósfera de crisis. Un mes después de que la cumbre económica del G7 en Quebec colapsara en medio de amargas recriminaciones sobre las medidas de guerra comercial de EEUU contra Europa, las relaciones diplomáticas y militares entre Washington y la Unión Europea (UE) continúan deteriorándose rápidamente.
Source: Diversas
