Una fuerza del ejército de ocupación israelí irrumpió este lunes en la aldea de Rasm Al-Halabi, ubicada en la provincia de Quneitra, en el suroeste del país, donde estableció un puesto de control temporal.
Según divulgaron medios de prensa sirios, la patrulla, compuesta por vehículos 4×4, desplegó el puesto de control sin que se reportaran detenciones o se dieran a conocer las motivaciones de la incursión.
Asimismo, otra unidad israelí integrada por tres vehículos penetró en la aldea de Al-Samadaniyya Al-Sharqiya, también en Quneitra.
Anteriormente, el ejército de ocupación reanudó la destrucción con con excavadoras de la Reserva Natural de Jabata al-Khashab, en Quneitra, mientras una patrulla israelí invadió áreas próximas a la ciudad de Khan Arnabeh.
Los pobladores denunciaron que en menos de dos días, se arrasaronb más de 10 hectáreas de árboles forestales antiguos en la Reserva de Jabata Al-Khashab.
Las violaciones israelíes en el sur de Siria continuaron sin pausa en los últimos días, con incursiones diarias registradas en las zonas rurales de Quneitra y Daraa, donde se produjeron arrestos, cuyos detenidos han sido liberados posteriormente.
Además, las fuerzas de ocupación mantienen el hostigamiento contra los agricultores de Quneitra, impidiéndoles acercarse a sus tierras bajo el pretexto de la proximidad a las bases militares israelíes. En diversas ocasiones recurren a disparos de advertencia y bombas de humo para intimidar a los residentes.
El presidente sirio Ahmed Al-Shara reiteró que el acuerdo de seguridad con “Israel” es una “necesidad” que debe respetar la unidad y el espacio aéreo de Siria, además de estar bajo supervisión de la ONU. Sin embargo, descartó discutir por ahora cuestiones de normalización o el futuro del Golán ocupado, y enfatizó que la prioridad es “detener las reiteradas incursiones israelíes y garantizar la estabilidad interna”.
Source: Prensa Latina