A medida que se acerca la fecha límite de retirada, estipulada en el acuerdo de alto el fuego, el enemigo israelí ha aumentado la presión para obtener una nueva prórroga con el fin de continuar con sus ataques y violaciones.
El alto el fuego entró en vigor el 27 de noviembre de 2024, poniendo fin a una guerra sionista de 66 días en el Líbano. Una vez finalizado el plazo de retirada de 60 días, el patrocinador parcial del acuerdo, EEUU, apoyó al enemigo israelí para que mantuviera sus fuerzas de ocupación en el sur del Líbano hasta el 18 de febrero de 2025.
Pocos días antes de la fecha límite, el enemigo israelí comenzó a ejercer diversas formas de presión para retrasar la retirada. En este sentido, los medios de comunicación israelíes citaron a algunos funcionarios que afirmaban que el ejército permanecería en el sur del Líbano durante un período más largo, aunque algunos medios informaron lo contrario.
En este sentido, el Canal 14 israelí mencionó que, en virtud del acuerdo de alto el fuego, y a menos que haya algún cambio, el ejército “israelí” se retirará del Líbano en una semana.
El canal de televisión Al-Hadath informó que los funcionarios libaneses acordaron una nueva prórroga del plazo de retirada hasta después del próximo abril. Sin embargo, el presidente Michel Aoun y el presidente de la Cámara de Representantes, Nabih Berri, negaron categóricamente tales rumores lanzados por “Israel” y reiteraron la exigencia de que las fuerzas de ocupación israelíes se retiren del sur del Líbano antes del 18 de febrero.
Pocas horas después de que la postura política libanesa confirmara el rechazo a la fecha límite de retirada, los aviones de guerra israelíes crearon explosiones sónicas sobre varias áreas libanesas, incluida Beirut, por primera vez desde el 27 de noviembre. Los simulacros de incursiones sionistas también se llevaron a cabo sobre la Beqaa y Al-Matn.
Source: Al Manar