El presidente estadounidense ha dado marcha atrás ligeramente tras sus polémicas declaraciones sobre el traslado de los habitantes de Gaza. Donald Trump parecía menos categórico que a principios de semana.
Aunque había afirmado que EEUU tomaría el control del territorio palestino vaciado de sus habitantes para desarrollar allí proyectos inmobiliarios tras el fin de la guerra israelí contra Gaza, finalmente aseguró el viernes que “no es en absoluto urgente”.
Gaza será “entregada por “Israel” a EEUU al final de los combates”, insistió el jueves el presidente estadounidense, queriendo transformarla en la “Costa Azul de Oriente Medio”.
Para entonces, los palestinos “ya habrán sido reasentados” en otras partes de la región, especialmente en Egipto o Jordania, sugirió además.
Ambos países, junto con Hamas y la Autoridad Palestina en Cisjordania ocupada, han rechazado la opción, que ha provocado una protesta internacional.
La ONU, por su parte, ha advertido contra cualquier “limpieza étnica”. Y las condenas han llegado de todo el mundo, incluyendo de los países de la Unión Europea, los países árabes y los países islámicos.
Source: Diversas