El director del periódico en lengua árabe editado en Londres Rai al Youm, Abdel Bari Atwan, ha dedicado un editorial al Yemen.
“La muerte de cuatro militares emiratíes en el choque de su helicóptero en Yemen mientras efectuaban una misión en el marco de la intervención militar de la coalición liderada por Arabia Saudí ha supuesto una nueva derrota de ésta. El choque coincidió con un ataque con misiles en las aguas territoriales del Yemen, en el Mar Rojo, contra un navío emiratí desde otro que pertenecía al movimiento Ansarulá.
Yemen ha desarrollado una capacidad misilística y posee la tecnología para la fabricación y desarrollo de misiles sofisticados. En otro ataque anterior con misiles llevado a cabo por el Ejército yemení y los comités populares de Ansarulá contra el navío de guerra emiratí Swift junto a la costa de Muja, el pasado 30 de Julio, perecieron 12 militares emiratíes.
Estos ataques con misiles contra bases, posiciones y navíos de guerra de Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos (EAU) han roto el equilibrio de fuerzas y pueden cambiar los hechos sobre el terreno en favor de Yemen, y más concretamente de la alianza entre el movimiento Ansarulá y el Congreso General Popular, liderado por el ex presidente Ali Abdulá Saleh. Algunos analistas creen que cuanto más dure la guerra más crecerá la eficacia de las fuerzas yemeníes sobre el terreno.
Los ejércitos saudí y emiratí han fracasado y eso es por lo que la coalición ha pedido el despliegue de soldados sudaneses, pero esto no podrá influir sobre el terreno, ya que una crisis real golpea las filas de la coalición. Los 5.000 soldados sudaneses han preferido, sobre todo, permanecer detrás de las líneas del frente para volver a su país sanos y salvos.
Arabia Saudí y los países de la coalición cometieron un grave error al imponer el bloqueo a Yemen y cerrar el aeropuerto de Sanaa. Y el bombardeo de civiles no ha hecho más que empeorar la situación. Todo el pueblo yemení se ha vuelto en contra de la coalición pro-saudí, el partido del presidente dimisionario Mansur Hadi se ha disuelto y Hadi no es ya más que un cadáver político. El bloqueo ha provocado una crisis de hambruna y una epidemia de cólera, pero no ha podido doblegar la voluntad de los yemeníes.
El general Abdulá Saleh, sobrino del ex presidente de Yemen y uno de los ilustres comandantes del Ejército, ha amenazado con lanzar misiles contra los aeropuertos de Arabia Saudí y EAU si no se pone fin al bloqueo impuesto al aeropuerto de Sanaa. Esta amenaza debería ser tomada en serio, señala Atwan. Imaginemos las repercusiones del bombardeo del aeropuerto de Dubai, el de Yeddah o el de Riad.
Baste recordar la caída en un 80% de los beneficios netos de la compañía aérea emiratí Etihad Airways, que había ya perdido el año pasado 1.800 millones de dólares.
La coalición Ansarulá-Congreso General del Pueblo no va a ser doblegada, especialmente en un momento en que su red, tanto en Yemen como en el extranjero, se desarrolla. Por el contrario, Mansur Hadi y su grupo se está reduciendo como un goteo y hay pocas personas que pronuncien su nombre y muchas menos que quieran su regreso al poder.
La reapertura del Aeropuerto de Sanaa y la vuelta a la mesa de negociaciones ocurrirá tarde o temprano, pero lo cierto es que la coalición saudí se enfrenta a un fracaso total en Yemen.
Source: Rai al Youm