Dos centenares de militantes se han rendido en estos días en el suroeste de la provincia de Damasco en el marco del proceso de reconciliación nacional promovido por el gobierno sirio.
La mayoría de las rendiciones tuvieron lugar en la localidades de Sasa, Beit Sabir, Beit Tima, Hasnu y Kafr Haur, donde más de 200 miembros de grupos armados se rindieron el jueves entregando todas sus armas y comprometiéndose a no cometer ninguna acción futura que amenace la paz y seguridad del país y su estabilidad.
Según el canal Al Mayadin, esos 200 militantes cuentan ahora con unirse al Ejército sirio. Fuentes oficiales sirias califican de “crucial” esta decisión para el restablecimiento de la seguridad en las regiones próximas al Golán ocupado.
Estos hechos se produjeron después de que los terroristas del Frente al Nusra, la rama de Al Qaida en Siria (que se autodenomina ahora Fatah al Sham) abandonaran esta región. Al menos 135 de estos ellos partieron hacia la provincia de Idleb donde se están juntando ahora todos los terroristas recalcitrantes de diversas partes de Siria que se niegan a aceptar la amnistía y deponer las armas.
En contraste, unos 1.200 militantes han depuesto las armas en esta zona y se han reintegrado en la vida civil tras acogerse a la amnistía aprobada por el gobierno sirio y deponer las armas.
En la provincia de Deraa fueron resueltos también esta semana los expedientes de 89 militantes que entregaron las armas y que buscan reintegrarse en la vida civil.
El número de ciudades, localidades y pueblos que se han unido a procesos de reconciliación es ahora de 1.086, señaló el Centro Ruso para la Reconciliación en Siria.
Source: Prensa Libanesa
