Se reiniciaron las actividades en el Puerto de Beirut y es posible que funcione “con más de dos tercios de su capacidad”, según el acuerdo unánime de las autoridades que lo tienen a su cargo o conocen la marcha de los asuntos allí. La razón es que la terminal de contenedores, por la que discurre alrededor del 75 por ciento del tráfico del puerto, no sufrió daños.
El daño causado por la explosión del 4 de agosto en el puerto de Beirut es enorme. Mirando sus escombros desde un ángulo amplio, parece que llevará años reiniciarlo. Pero afortunadamente el puerto ya reinició sus operaciones y desde hoy es posible que funcione a más de dos tercios de su capacidad, debido a la ausencia de daños en la terminal de los contenedores.
Esta se considera, como en todos los grandes puertos, el núcleo del trabajo, pues a través de ella se realiza el proceso de descarga de contenedores del barco a la terminal con el fin de traerlos al país o reenviarlos a otro puerto. Según fuentes que trabajan en el puerto, “no hay daños en la terminal, especialmente en las 13 grúas que se están utilizando”.
Los trabajos de reactivación comenzaron administrativamente hace días, luego de que se alquilara un edificio a la Administración de Aduanas y Seguridad Pública, cerca de la Puerta N° 14 del puerto (al lado del “Foro de Beirut”). Esta puerta no resultó dañada por la explosión.
Fuentes del puerto confirmaron que las grúas operadas por la empresa BCTC (operadora de la terminal), con la que el Estado libanés tiene contrato firmado desde 2004, se encuentran en buen estado y la explanada de la terminal no ha sufrido daños, lo que permite la realización de los trabajos por la empresa. Diversos funcionarios visitaron el puerto el lunes para detectar daños y determinar cómo reiniciar los trabajos.
El Ministerio de Defensa está ayudando a la administración portuaria a retomar su labor, según indicaron algunas fuentes que informan de una reunión celebrada el lunes entre personal del Ministerio con funcionarios de la administración portuaria. Las fuentes señalaron que la investigación abordó el tema de los daños en los dispositivos del programa “Najm”, que se utiliza para completar las transacciones e ingresar datos, señalando que la tendencia es “a ejecutar este programa a través de los dispositivos del aeropuerto, adonde se le trasladan las operaciones administrativas, desde el registro de las solicitudes de importación y el pago de facturas, antes de recibir las mercancías desde el puerto.
El proceso de reinicio de las operaciones requirió una decisión del ministro de Obras Michel Nayyar -antes de dimitir como resultado de la renuncia del gobierno de Hassan Diab- para designar un sustituto del presidente del Comité Interino de Gestión e Inversiones del puerto, Hassan Quraitem. La elección recayó en Bassem al Qaisi.
El hecho de que “la terminal de contenedores es el núcleo del puerto, y que las grúas no estén dañadas significa que la operaciones continúan, pero preferimos empezar nombrando a un funcionario encargado de administrar el puerto por un período de seis meses. También se ha realizado un proceso de reestructuración ya que se han perdido empleados y otros están detenidos”.
Como resultado del reinicio de las operaciones, un barco cargado con 400 contenedores, pertenecientes a la compañía Algerian-Arkas entró en el puerto el lunes tras esperar un día por el permiso de entrada. Otro barco procedente de la compañía CMA CGM, con sede en Marsella entró antes, dos días después de la explosión, y descargó 20 contenedores.
Source: Al Akhbar