Una conferencia de alto nivel de las Naciones Unidas instó a todos los países a reconocer a Palestina como Estado, a la vez que condenó duramente la guerra de genocidio que el régimen israelí ha librado desde octubre de 2023 hasta la fecha en la Franja de Gaza.
El evento de dos días concluyó el martes tras la firma de la “Declaración de Nueva York”, que instaba al reconocimiento global.
Hasta 147 de los 192 Estados miembros de las Naciones Unidas han reconocido al Estado de Palestina. Entre los que se han negado hasta la fecha se encuentra EEUU, el principal aliado del régimen, que invariablemente ejerce su poder de veto para proteger a Tel Aviv de las medidas punitivas de la ONU.
Sin mencionar a Tel Aviv ni a Washington, que también apoya a Tel Aviv con ayuda letal sin restricciones, el documento afirma que “las acciones unilaterales ilegales representan una amenaza existencial para la realización del Estado independiente de Palestina”. La conferencia denunció además la agresión del régimen contra la población civil y las infraestructuras civiles en Gaza, así como su asedio y hambruna, que han provocado una devastadora catástrofe humanitaria y una crisis de protección.
La declaración enfatizó que poner fin a la ocupación e implementar la solución de dos Estados son la única manera de lograr las aspiraciones legítimas de palestinos e israelíes, y declaró el compromiso de los Estados participantes de tomar medidas concretas, sujetas a plazos, e irreversibles hacia una solución pacífica.
La Declaración de Nueva York señaló que la Franja de Gaza es parte integral del Estado palestino y debe estar “libre de ocupación, bloqueo, desplazamiento y constricción territorial, y que la Autoridad Palestina debe ser exclusivamente responsable de la gobernanza, la seguridad y la aplicación de la ley, con el apoyo internacional apropiado”.
Más de 60.000 palestinos han muerto como consecuencia de la guerra, que ha obligado a Tel Aviv a endurecer su ya severo asedio a la franja costera, impuesto desde 2007 hasta la fecha, hasta alcanzar proporciones insoportables.
Incluso importantes organizaciones israelíes de derechos humanos, como B’Tselem y Médicos por los Derechos Humanos, han afirmado que el régimen estaba cometiendo genocidio en Gaza, calificando a EEUU y Europa de cómplices de las atrocidades de Tel Aviv.
El primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu, ha rechazado la reunión. EEUU también la ha boicoteado, calificándola de “improductiva e inoportuna”.
Source: Diversas