Respaldado por sus aliados, el Ejército sirio ha llevado a cabo un impresionante avance en el desierto sirio a lo largo de las fronteras entre Siria e Iraq en dirección a la ciudad de Deir Ezzor entrando así en la provincia rica en petróleo por primera vez en años, desde la caída de Badiyah en manos de los terroristas del EI.
Durante su avance, el Ejército sirio ha capturado Ard al Washash, la Presa de Al Waer, la región del Cañón de Al Waer y gran parte del desierto cerca de la Estación de Bombeo T2. Los últimos avances del Ejército le han llevado a alcanzar el sureste de la provincia de Deir Ezzor, a unos 100 kms del bastión de Abu Kamal, que continúa en manos del EI y que muchos consideran como la nueva capital del grupo terrorista tras el asedio de Raqqa por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
El Ejército ha avanzado desde el este de Al Tanf hacia la parte sur de la ciudad de Abu Kamal, en el Este de Deir Ezzor, y recuperó el control de Wadi al Lavizeh, cerca de la frontera con Iraq. Una fuente militar confirmó que el Ejército ha avanzado más de 30 kms en un día y ha reforzado su posición en esta estratégica región.
El Ejército se encuentra ahora a unos 120 kms de la ciudad de Deir Ezzor, rodeada por el EI, desde su flanco sur, y 135 kms desde el eje de Palmira. Esto supone, por supuesto, una inyección de moral para los defensores de la ciudad y de la base aérea cercana, que han venido rechazando todas las ofensivas del EI desde hace años. Ellos esperan ver aparecer en breve a los liberadores para romper el cerco.
Cuando el Ejército sirio alcance Deir Ezzor, la presencia del EI en Siria estará cerca de terminar para siempre. El grupo terrorista lo sabe y por eso arrojará el grueso de sus fuerzas en Siria para esta batalla apocalíptica que cambiará de forma irreversible la guerra de Siria, aproximando su final.
Source: Al Masdar News