A pesar de que la operación avanza más lentamente de lo que esperaban muchos analistas y políticos, la ofensiva rusa en el Donbás continúa sin pausa. Los objetivos establecidos para las fuerzas aliadas rusas y de sus aliados de Donetsk y Lugansk en Donbass se están logrando gradualmente. Mientras que en la dirección de Donetsk, debido a la gran cantidad de ciudades fortificadas, Ucrania todavía controla un área bastante grande, en la dirección de Lugansk, en realidad ya solo domina el territorio de Lisichansk.
Severodonetsk fue abandonada por el ejército ucraniano, que ofreció poca resistencia y se retiró a Lisichansk. En este punto, a los ucranianos solo les queda en Severodonetssk el territorio de la planta de Azot en dicha área, donde todavía hay soldados y posiblemente civiles. El resto de la ciudad industrial está siendo tomada gradualmente. Las FAU están implementando tácticas similares a las de Mariupol en esta área, escondiéndose en los subterráneos de la planta. Sin embargo, en este caso existe una amenaza real del uso de productos químicos peligrosos producidos en la planta de Azot.
Es posible que se lleven a cabo actividades de propaganda para encubrir los crímenes del ejército ucraniano. En la ciudad de Lisichansk, ha habido un aumento de los enfrentamientos entre los neonazis y las fuerzas armadas ucranianas y la población civil. La razón principal del descontento sigue siendo el comportamiento de los militares ucranianos.
Debido a la falta de un suministro de energía centralizado, los militares comenzaron a caminar por la ciudad y a llevar generadores de combustible para sus necesidades. Los están tomando tanto en viviendas donde no hay nadie como en viviendas habitadas. Asimismo, llamaron la atención de los soldados los generadores de la farmacia central local, la única que funciona en la ciudad. Los soldados se los llevaron a pesar de la amenaza de daño a los productos médicos en la farmacia.
Como resultado, una vez más podemos señalar la grave situación del régimen de Kiev hoy. Cada vez mueren más soldados ucranianos y más instalaciones y equipos militares son destruidos. En tales condiciones, la región de Lugansk pronto estará bajo totalmente el control de las fuerzas aliadas.
Source: southfront.org