El ministerio de Relaciones Exteriores criticó en un comunicado la ausencia de condenas a las acciones de Tel Aviv al considerar que esa estrategia protege a “los criminales de guerra israelíes”.

Asimismo, denunció la muerte este sábado de Yahya Ali Adwan, de 27 años, quien falleció tras el impacto de una bala en el corazón durante la represión de los soldados a manifestaciones en el poblado de Azzun.

Este crimen es un eslabón más de la serie de ejecuciones extrajudiciales ejecutadas por las fuerzas de ocupación bajo las instrucciones del Gobierno de ese país, subrayó.

La cancillería afirmó que esas acciones reflejan la brutalidad y el racismo que emplea la entidad sionista al reprimir y abusar de civiles indefensos.

Una vez más exigimos al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, activar el sistema de protección internacional para el pueblo palestino “ante la escalada de crímenes cometidos por las fuerzas de ocupación y las milicias de colonos”, demandó el texto.