El jefe de seguridad de las Brigadas iraquíes de Hezbolá, Abu Ali Al Askari, negó “cualquier vínculo de las Brigadas con el ataque a misiones diplomáticas”, confirmando “la continuación de la resistencia hasta que el último soldado ocupante abandone el país”.
En su declaración, Abu Ali Al Askari destacó que “las Brigadas iraquíes de Hezbolá rechazan cualquier ataque a las misiones diplomáticas en el país”, destacando que “todavía están comprometidas con esta decisión de no bombardear la Embajada estadounidense y apuntar únicamente a las fuerzas del ejército de ocupación y sus bases militares”.
Continuó: “La decisión de las Brigadas de atacar a las fuerzas armadas norteamericanas es una decisión puramente iraquí, y solo cesará cuando salga el último soldado de las fuerzas de ocupación”.
Askari hizo un llamado a “los hermanos de la resistencia iraquí para preservar las reglas de enfrentamiento y no tomar atajos en esta batalla”, enfatizando que “la respuesta a cualquier ataque a la resistencia será severa”.
El comunicado se produce tras los ataques, dos veces en dos días, a la Zona Verde, en la que se ubican varias misiones diplomáticas, incluida la sede de la Embajada de EEUU en Iraq. Los sistemas de defensa de la Embajada de EEUU derribaron el miércoles un dron y el jueves interceptaron dos cohetes disparados contra la misión diplomática que explotaron en el aire.
El líder del movimiento Asa’ib Ahl al Haq, Qais al Jazali, negó, por su parte, en un comunicado que “la resistencia esté relacionada con el ataque a la embajada estadounidense en la zona verde del centro de Bagdad”, destacando que “eso no forma parte de la ecuación de la respuesta”.
Source: Diversas