En la región oriental del mar Mediterráneo, cerca de la base naval rusa en Tartús, se realizaron ejercicios para garantizar el paso sin problemas de los barcos civiles desde y hacia Siria.
Un gran buque antisubmarino, el “Almirante Kulakov”, salió de la base naval en la gobernación de Tartús, en Siria, con destino al mar Mediterráneo.
Según el escenario de las maniobras, un buque mercante fue atacado por un submarino enemigo. La tripulación del barco tiene la tarea de atacar y destruir el submarino enemigo.
Un helicóptero ruso Ka-27 despegó del barco a pocos kilómetros de la costa, cerca del puerto sirio de Baniyas. A bordo del barco hay todo un conjunto de sistemas electrónicos para detectar submarinos, incluso a grandes profundidades.
Después de sobrevolar la zona acuosa, el helicóptero encontró un objetivo submarino y envió un mensaje al capitán del “Almirante Kulakov”, quien decidió atacar al submarino enemigo virtual con bombas submarinas.
Según el escenario de las maniobras, es posible que el submarino no operara solo. La tarea de todos los barcos rusos que participan en la operación es monitorear la situación en profundidad y en superficie, y establecer una zona segura para el paso de buques comerciales, según el canal ruso Zvezda.
Source: Al Masdar News