París esperaba que la postura del secretario general de Hezbolá, Sayyed Hasan Nasralá, sobre las acusaciones de “traición” del presidente francés Emmanuel Macron hubiera sido más dura, dijeron fuentes a Al Manar.
La semana pasada, el embajador francés en el Líbano, Bruno Foucher, se reunió con el jefe de relaciones internacionales y árabes de Hezbolá, Ammar Al Musawi.
La reunión con el embajador francés saliente tuvo lugar un día después del discurso de Sayyed Nasralá en el que el líder de la Resistencia dijo que Macron era bienvenido como amigo pero no como guardián y gobernador del Líbano. Mientras tanto, Sayyed Nasralá reafirmó el compromiso de Hezbolá con la iniciativa de Macron dirigida a poner fin a la crisis política en el Líbano causada por la formación del nuevo gobierno.
Fuentes bien informadas de la reunión le dijeron a Al Manar que París esperaba una postura más dura de Sayyed Nasralá, y señaló que el discurso del secretario general de Hezbolá fue monitoreado de cerca por el Palacio del Elíseo.
“Esto indica que París sabe muy bien que las acusaciones de que Hezbolá ha estado obstaculizando la formación del nuevo gobierno eran infundadas”, dijo una de las fuentes a Al Manar.
Durante la reunión con Al Musawi, Foucher estuvo de acuerdo con la mayoría de los puntos planteados en el discurso de Sayyed Nasralá, y describió algunos de ellos como “totalmente correctos”, según la fuente.
El enviado francés, sin embargo, dijo que Macron esperaba que Hezbolá mostrara más disposición a facilitar el tema de la formación del gobierno, pero la respuesta de Al Musawi fue clara: “¿Se espera que nos anulemos?”
La fuente también agregó que Foucher estuvo de acuerdo en que las posturas anunciadas por el rey Salman de Arabia Saudí contra Hezbolá y las nuevas sanciones de las administraciones estadounidenses contra dos ex ministros libaneses afectaron negativamente a la iniciativa de Macron.
Aún así, según Foucher, París sigue comprometida con la colaboración con Hezbolá.
Source: Al Manar