Washington está utilizando sus operaciones contra el Daesh en el norte y oeste de Iraq para evitar la expulsión de sus soldados, dijo el experto iraní Hassan Hanizadeh.
En una entrevista con la agencia de noticias iraní ILNA, el experto político de Oriente Medio Hassan Hanizadeh dijo que, como en el pasado, EEUU ahora está explotando la amenaza del Daesh para intentar mantener su presencia tanto en Iraq como en Siria.
Todos los indicios son claros de que después de la decisión del Parlamento iraquí de expulsar al ejército estadounidense del país, Washington ha tomado medidas en los últimos dos meses para permitir que el Daesh se reorganice en el norte y noroeste del país. Hanizadeh dijo que el objetivo de EEUU es sugerir que es necesaria la presencia continua del ejército estadounidense.
Según el comentarista iraní, los norteamericanos buscan alcanzar dos objetivos: primero, si el gobierno del nuevo primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, insiste en la retirada estadounidense, Washington fomentará las actividades del Daesh para que el gobierno iraquí termine, a pesar de sí mismo, solicitando el mantenimiento de la presencia militar estadounidense en Iraq. En este sentido, “la Casa Blanca está enviando una señal importante a Bagdad: si continúa exigiendo la retirada de nuestros soldados, tendrá graves crisis de seguridad”, dijo Hassan Hanizadeh.
En segundo lugar, la campaña mediática de los estadounidenses apunta exactamente a las regiones donde los kurdos o sunníes son mayoría. En otras palabras, las recientes operaciones militares estadounidenses contra elementos del Daesh se concentran en áreas cuyos diputados no votaron en favor de la retirada del ejército estadounidense de Iraq.
Hanizadeh dijo: “La cobertura mediática de las recientes operaciones contra el Daesh es una señal para la opinión pública en Siria e Iraq: sin la presencia del ejército estadounidense, los habitantes de los dos países deberían esperar una nueva ola de masacres, saqueos e inseguridad”.
Al mismo tiempo, EEUU busca desacreditar los incansables esfuerzos de la Resistencia iraquí, incluidas las Fuerzas de Movilización Popular (Hashid al Shaabi), al intentar sugerir el fracaso de estas fuerzas de su lucha antiterrorista para erradicar al Daesh. Políticamente, la Casa Blanca busca desafiar a la Resistencia en Iraq e intentar marginarla en la escena política.
Hassan Hanizadeh luego habló de la presencia del ejército estadounidense al este del Éufrates en Siria. “Esta región es importante para los estadounidenses no solo por sus recursos petroleros, sino también por su ubicación estratégica”, dijo. De hecho, el control de esta región siria permite al ejército estadounidense transferir armas dentro de Iraq y facilitar la infiltración de militantes del Daesh en este país.
Hanizadeh concluye: “En unos días, Washington y Bagdad comenzarán sus negociaciones estratégicas. La parte estadounidense desea poder utilizar la amenaza del Daesh como palanca de presión para convencer a la parte iraquí para que se resigne a la presencia continua de soldados estadounidenses en Iraq.”
Decisión de expulsar a las tropas extranjeras es irreversible
Sin embargo, en el umbral de las negociaciones estratégicas entre Iraq y EEUU, el Comité de Seguridad y Defensa del Parlamento iraquí afirmó que la decisión de expulsar a las tropas extranjeras del país es irreversible señalando que el Comité de Negociación con Washington no puede ignorarlo y también pidió que aclare al Parlamento lo que pretende hacer.
Badr al Ziyadi, miembro del Comité, dijo que el comité de negociación con EEUU debe informar al Parlamento sobre los temas que debatirá con Washington.
“El Parlamento ha tomado su decisión irreversible de expulsar a las fuerzas extranjeras y el equipo negociador debe seguir comprometido con esta decisión”, agregó.
“Las bases militares deben ser entregadas a las fuerzas iraquíes y devueltas a los iraquíes”, dijo el parlamentario iraquí.
Al respecto, Hisham Daud, asesor de Mustafa al Kazemi, primer ministro iraquí, dijo, por su parte, que las conversaciones estratégicas con EEUU deben incluir el retiro de las fuerzas extranjeras.
“Los gobiernos iraquíes anteriores tuvieron relaciones militares con otros países, pero el gobierno de Kazemi tiene la capacidad militar y de seguridad necesaria para contrarrestar las amenazas y el terrorismo. Por lo tanto, no es necesario que este número de tropas estadounidenses permanezca en el país”, continuó.
El gobierno actual cree que la era de la presencia de las fuerzas armadas de EEUU en Iraq ha terminado y su retirada es necesaria para que las relaciones y la cooperación entre los dos países en los campos de la educación y la economía puedan continuar.
La mayoría de las fuerzas políticas iraquíes habían exigido previamente que la expulsión de las tropas estadounidenses de Iraq sea una prioridad durante las negociaciones con Washington.
Source: Press TV