Los iraníes participaron masivamente en el funeral a un militar y un civil martirizados recientemente a manos de agitadores mientras que las manifestaciones se expanden en todo el país para condenar a los provocadores de disturbios, que han utilizado el pretexto de las protestas contra el aumento de los precios del combustible.
La procesión del funeral y una posterior ceremonia de enterramiento tuvieron lugar el miércoles en el condado de Malard, en la provincia de Teherán, informó IRNA. Los asistentes despidieron a los mártires Morteza Ebrahimi, uno de los comandantes del Batallón Imam Hossein del Cuerpo de la Guardia de la Revolución Islámica (IRGC) en el condado, y Mostafa Rezaei, un empleado del Municipio de Malard.
En otras partes del país, la gente se congregó en la ciudad de Gorgan, la capital de la provincia noroccidental de Golestan, para expresar su indignación contra los agitadores, según la Agencia de Noticias Tasnim.
Los manifestantes gritaron consignas contra EEUU e Israel, y expresaron su resentimiento hacia quienes provocan disturbios.
Los manifestantes también afirmaron su lealtad al Líder de la Revolución Islámica, Ayatolá Sayyed Ali Jamenei, y todo el establecimiento.
La gente también marchó a través de Jorramabad, la capital de la provincia occidental de Lorestan, y la ciudad de Ardabil, en el noroeste, en apoyo del gobierno y contra los agitadores.
La imagen proporcionada por la Agencia de Noticias Tasnim el 20 de noviembre de 2019 muestra también una manifestación contra la violencia en la ciudad de Ardabil, en el noroeste.
La provincia de Alborz, en el norte de Irán, organizará manifestaciones similares el jueves.
El gobierno elevó los precios de la gasolina la semana pasada para moderar la tasa de consumo nacional, que se sitúa en 110 millones de litros, 40 millones de litros por encima de los planes estatales.
La medida provocó algunas protestas pacíficas, pero elementos descontrolados, que abusaron de la situación, entraron rápidamente en escena, destruyeron propiedades públicas, incendiaron bancos y estaciones de servicio, entre otras instalaciones, y abriendo fuego contra civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.
Entre los manifestantes se encontraban provocadores con vínculos con el grupo terrorista Organización de los Mujahedin-e-Jalq (MKO), respaldado por EEUU, según los informes.
Ha habido informes de tres muertes entre las fuerzas de seguridad y dos civiles por ataques de estos agitadores en diferentes lugares.
Source: Press TV