La cancillería rusa descartó el miércoles la posibilidad de establecer alguna cooperación con EEUU respecto al tema del petróleo sirio, luego que la Casa Blanca anunció acciones para “proteger” los yacimientos de hidrocarburo en el país levantino.
En este caso, se trata de la riqueza nacional de todo el pueblo sirio y estamos seguros que él es el único con derecho para disponer de sus yacimientos de hidrocarburo, aseguró una aclaración del ministerio ruso de Asuntos Exteriores.
Solo el pueblo sirio y su ejército deben estar a cargo de las instalaciones petroleras como parte del ejercicio soberano de esta región, se destaca en una declaración oficial de la referida entidad.
Con anterioridad, el presidente norteamericano, Donald Trump, orientó desplegar fuerzas militares de su país con el pretendido objetivo de proteger instalaciones petroleras en Siria, lo cual, afirman expertos, puso al descubierto el verdadero objetivo de Washington en esa nación.
El Pentágono había anunciado el retiro la semana pasada de gran parte de los casi dos mil uniformados desplegados en el país mesoriental, pero ahora habla de dejar a unos 800 militares a cargo del mencionado aseguramiento de las instalaciones petroleras.
Al respecto, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, declaró la víspera que era muy difícil lidiar con un gobierno que un día anuncia la salida de sus tropas de Siria y al otro afirma que desplegará allí un contingente bélico, cuando su presencia allí es totalmente ilegal. Estados Unidos instaló casi una decena de bases militares en el norte de Siria, bajo el pretexto de apoyar la lucha contra el movimiento terrorista Estado Islámico (EI), aunque este último aumentó su fuerza, comentan fuentes militares rusas.
Aunque el Pentágono anunció la semana pasada la eliminación del líder del EI, Moscú y Damasco pusieron en duda esa versión, sobre todo, porque en las zonas controladas por las tropas estadounidenses se sospecha Washington reclutaba a nuevos miembros de grupos extremistas.
La jefatura del Pentágono amenazó con responder con la fuerza a lo que calificó de intento de ‘apoderarse’ de los yacimientos de hidrocarburos por parte de uniformados rusos o sirios.
Tropas de Rusia y Turquía realizan desde esta semana un patrullaje conjunto de una franja de 20 kilómetros entre el territorio sirio y la frontera turca, con el fin de evacuar de esa zona a grupos armados kurdos, en su momento respaldados por las tropas norteamericanas.
El arreglo alcanzado entre Ankara y Moscú dejó fuera a Washington de las decisiones referente al territorio norte sirio, donde se ubican la mayoría de las instalaciones petroleras y gasíferas de la nación levantina.
Source: PL