El Ejército sirio ha rechazado un intento de militantes apoyados por Turquía de infiltrarse en la provincia de Hasaka.
El Ejército sirio combatió un intento de infiltración llevado a cabo por grupos armados apoyados por Turquía que buscaban tomar el pueblo de Al Ahras, al noroeste de la ciudad de Tal Tamr. Una unidad del Ejército sirio chocó con los atacantes y repelió su intento.
Las tropas turcas han consolidado su control sobre Ras al Ain y han ocupado también las localidades cercanas de Jan Tamr y Shukaria tras la retirada de los combatientes kurdos de estas últimas.
Las áreas situadas al Este del Río Éufrates, en el norte de Siria, se han convertido en el escenario de la Operación turca Fuente de Paz, respaldada por algunas facciones opositoras sirias pro-Ankara, que busca expulsar de un área de 32 kms de profundidad y 400 kms de longitud a los combatientes kurdos, a quienes Turquía considera terroristas y vinculados al proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) .
El 13 de octubre, el gobierno sirio envió fuerzas militares a la frontera con Turquía, en base a los acuerdos alcanzados con los líderes kurdos.
Por otro lado, SANA informó que las fuerzas estadounidenses destruyeron su radar en la base de Yabal Abdul Aziz en el oeste de la provincia de Hasaka antes de retirarse.
Agregó que las fuerzas estadounidenses también destruyeron su cuartel general en el pueblo de Kasrk en su camino hacia la retirada.
Paralelamente, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció la intención de su país de reanudar su operación militar en el noreste de Siria, ya que los combatientes kurdos no se han retirado de la región en el período especificado y amenazó con “aplastarles la cabeza”, haciendo hincapié en que su país no se ha retirado de las condiciones establecidas al principio de la Operación Fuente de Paz.
Erdogan dijo que la operación en el noreste de Siria continuaría con más empuje al final del plazo de 120 horas si EEUU no cumplía sus promesas.
El presidente sirio, Bashar al Assad, había subrayado anteriormente la necesidad de detener la operación militar turca y en la retirada de todas las fuerzas ilegales del territorio sirio. Rusia ha rechazado, por su parte, cualquier violación de la soberanía siria.
Source: Diversas