Arabia Saudí se encuentra cada vez más aislada desde la desaparición de Yamal Khashoggi y, como muestra de ello, baste señalar las deserciones masivas de empresarios y representantes de los medios con respecto una conferencia de alto nivel sobre inversiones en el reino que va a celebrarse en Riad.
La conferencia Iniciativa de Inversión de Futuro se celebrará en la capital saudí a partir del 23 de octubre, pero se ha convertido ya en un fiasco cuando el pasado viernes varias grandes empresas cancelaron su participación y más a buen seguro seguirán su camino. Así por ejemplo, la compañía británica Virgin ha anunciado la cancelación de una inversión de 1.000 millones de dólares en un fondo soberano de Arabia Saudí. El director ejecutivo de JP Morgan, Jamie Dimon, y el director de Ford Motor, Bill Ford, han anunciado también que no acudirán a Riad. Todos ellos citaron el asesinato de Khashoggi dentro del consulado como la motivación para sus cancelaciones.
Los medios de comunicación que iban a cubrir esta conferencia se han retirado igualmente. Entre ellos están el New York Times, The Financial Times, CNN, Bloomberg y CNBC, que habían sido patrocinadores del evento. Algunas personalidades mediáticas como Patrick Soon-Shiong, propietario de Los Angeles Times, también cancelaron su participación.
El director de The Economist, Zanny Minton Beddoes, se ha retirado también de la conferencia. Poco antes, un editorial de la revista atacó a Bin Salman señalando que “su represión brutal contra los críticos, incluso moderados, está eclipsando políticas más admirables, que incluyen el poner frenos a la policía religiosa, el dejar que las mujeres conduzcan y el animarlas a trabajar… Su régimen comienza a parecerse a una dictadura nacionalista árabe, socialmente liberal, pero centralista, paranoica y construida sobre el miedo”.
El Banco Mundial ha informado también a las autoridades saudíes que su presidente, Jim Yong Kim, no acudirá a la conferencia. De momento, la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, y el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, han manifestado que sí piensan participar en ella.
La conferencia iba a servir teóricamente de apoyo a Visión 2030, un proyecto estrella del príncipe heredero Mohammed bin Salman, que depende en gran medida de las inversiones extranjeras.
Los organizadores de la conferencia han estado eliminando los nombres de todos aquellos que han anunciado su boicot a la misma de su sitio de Internet, una tarea ardua según se van produciendo cada día nuevas cancelaciones.
Source: Diversas