Una Comisión de Investigación de las Naciones Unidas (CdI), establecida por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, concluyó que las autoridades israelíes “tenían la intención de matar al mayor número posible de palestinos” y cometieron el crimen contra la humanidad de genocidio.
Según la “evaluación más fiable” hasta la fecha, “Israel” ha cometido y continúa cometiendo genocidio en Gaza.
El informe citó ataques directos contra civiles, incluidos niños, y asesinatos masivos en cantidades “mucho mayores” en comparación con guerras anteriores.
“Israel” creó intencionalmente condiciones que amenazaban la vida al retener suministros esenciales, actos que consideró “calculados” para lograr la “destrucción de los palestinos”, según el informe.
El informe de la comisión es el resultado de una investigación de dos años y se basa en un número creciente de evaluaciones que califican las acciones de “Israel” de genocidio.
Un informe anterior de la comisión de marzo concluyó que “Israel” había cometido actos consistentes con genocidio y había instrumentalizado la violencia sexual, aunque no llegó a declarar formalmente que se estaba cometiendo un genocidio.
Con base en la Convención de 1948, la comisión concluyó que las autoridades y las fuerzas de seguridad israelíes son responsables de cuatro de los cinco actos de genocidio reconocidos.
Estos incluyen el asesinato de miembros del grupo, causar graves daños físicos o mentales, imponer deliberadamente condiciones de vida destinadas a provocar su destrucción física y aplicar medidas destinadas a impedir los nacimientos dentro del grupo.
La comisión afirmó además que no había “ninguna necesidad militar que justificara su patrón de conducta” y que los ataques israelíes no mostraban “ninguna intención de aliviar el sufrimiento de los palestinos”.
“La comisión concluye que la intención genocida fue la única deducción razonable que se podía extraer con base en el patrón de conducta de las autoridades israelíes”, señala el informe.
A pesar de la afirmación del primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu, en julio de que “no había hambruna en Gaza” ni “ninguna política de hambruna”, la comisión encontró evidencia de una intención deliberada de imponerla. El informe afirmaba que las autoridades israelíes utilizaban mecanismos como la llamada Fundación Humanitaria de Gaza (FGH), respaldada por EEUU e “Israel”, para “mantener un control total sobre la distribución de la ayuda”, una política que solo se flexibilizó para permitir los lanzamientos aéreos de ayuda después de que un bloqueo de meses ya hubiera causado una grave crisis.
La FGH ha sido ampliamente criticada por la ONU y los grupos de ayuda humanitaria tanto por su insuficiente entrega de ayuda como por la precaria seguridad en torno a sus puntos de distribución, donde los disparos y los ataques siguen causando numerosas víctimas.
El informe señalaba que las fuerzas israelíes crearon deliberadamente “condiciones de vida insoportables” para una población sitiada, fomentando intencionalmente “una atmósfera de pánico y terror”, incluso mediante ataques contra civiles durante las operaciones de evacuación.
Mientras tanto, la Comisión de Investigación de las Naciones Unidas instó a los países a dejar de suministrar armas y equipos a “Israel” que puedan utilizarse para “actos genocidas”.
La publicación del informe se produce una semana antes de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, donde se espera que varias naciones reconozcan formalmente el Estado palestino.
Source: Diversas



