Las empresas estadounidenses se enfrentan a una creciente crisis financiera, con la morosidad en los préstamos en su nivel más alto en casi ocho años y la situación empeorará en el futuro cercano. Según un informe publicado por el Financial Times, existe una gran preocupación entre los analistas crediticios de que los aranceles impuestos por el gobierno estadounidense puedan contribuir al empeoramiento de la situación financiera de las empresas.
El periódico explicó que, aunque la economía estadounidense sigue creciendo y los consumidores siguen gastando, las empresas estadounidenses se enfrentan a dificultades cada vez mayores debido a los altos tipos de interés. Los préstamos bancarios de los bancos estadounidenses son más vulnerables a estas presiones, ya que estos préstamos suelen ser a tipos variables, lo que significa que se ven directamente afectados por los cambios en los tipos de interés.
Según datos de BankRegData, los prestatarios corporativos estadounidenses tenían más de 28.000 millones de dólares de deuda bancaria a finales de 2024. Esa deuda aumentó significativamente, en 2.200 millones de dólares en los últimos tres meses del año y en 5.400 millones de dólares en comparación con el año anterior. Cabe señalar que estos datos no incluyen los préstamos de prestamistas directos o fondos de crédito privados, que constituyen una parte creciente de los préstamos corporativos. Además, la tasa de morosidad de los préstamos bancarios aumentó al 1,3% a fines del año pasado, la tasa más alta desde el primer trimestre de 2017.
Por otro lado, los datos mostraron que los préstamos a las empresas disminuyeron en 100.000 millones en el cuarto trimestre de 2024.
En este contexto, David Hamilton, jefe de investigación de Moody’s, señaló que las empresas pequeñas y medianas serán las más afectadas en este entorno económico, ya que les resultará más difícil lidiar con tasas de interés más altas durante un período más largo. Hamilton explicó que las grandes empresas pueden no sentir el gran impacto de la crisis financiera, pero las pequeñas y medianas empresas se encuentran en una posición difícil.
Source: Al-Mayadeen (traducido por el sitio de Al Manar en español)