“En un punto, nuestros servicios de inteligencia detectaron contactos entre militantes del Norte del Cáucaso y representantes estadounidenses en Azerbaiyán”.

En una entrevista para un documental relativo a los 15 años de Putin en el poder, el presidente ruso señaló que las comunicaciones interceptadas por su país a principios de 2000 mostraron la existencia de contactos directos entre los separatistas del Norte del Cáucaso y los servicios de inteligencia de EEUU y que estos últimos habían suministrado apoyo logístico a los terroristas.

“En un punto, nuestros servicios de inteligencia detectaron contactos entre militantes del Norte del Cáucaso y representantes estadounidenses en Azerbaiyán”, dijo Putin durante el documental que fue transmitido por el canal Rossiya 1 TV el domingo.

“Y cuando hablé de eso al entonces presidente de EEUU (George W. Bush) él dijo: “Les daré una patada en el culo”. Unos pocos días más tarde, señaló, los jefes del servicio de inteligencia interna ruso (FSB) recibieron, sin embargo, una carta de sus homólogos estadounidenses en la que estos últimos señalaban que tenían el derecho a apoyar a dichas fuerzas.

“Los norteamericanos ayudaban incluso con el transporte de esta ayuda”, indicó.

“Algunos allá, en especial los servicios de inteligencia, pensaron obviamente que si ellos actuaban para desestabilizar a su principal rival geopolítico, que, como vemos en la actualidad, a sus ojos ha sido siempre Rusia, eso sería bueno para EEUU. Resultó, sin embargo, que no lo fue”, dijo Putin, que señaló que él había advertido a los países occidentales sobre los riesgos de apoyar a los terroristas.

En las décadas de 1990 y 2000, Rusia mantuvo un conflicto con los grupos terroristas separatistas en el Norte del Cáucaso, que recurrían allí a ataques terroristas contra dicho país. Esto llevó a prolongadas operaciones antiterroristas, que terminaron sólo oficialmente en 2009.

“Presidente” es un documental de dos horas construido alrededor de una entrevista con Putin, donde éste cuenta los momentos más memorables de los pasados 15 años. Dicho documental toca temas de carácter político y personal y muestra vídeos filmados por el cámara personal del presidente ruso que nunca antes habían sido vistos en televisión.

Al ser preguntado sobre la adhesión de Crimea a Rusia hace un año, Putin dijo que esto fue en última instancia la restauración de una “justicia histórica”. Él dijo que dicha decisión estuvo basada en la voluntad del pueblo de la península: “Si la gente quería volver a Rusia y no ser gobernada por neonazis, ultranacionalistas y colaboracionistas de los nazis (los seguidores de Bandera), no teníamos derecho a frustrar su voluntad. No fue porque quisiéramos arrebatar algo y ni siquiera tampoco debido a la importancia estratégica de Crimea en el Mar Negro”.