Aviones rusos han lanzado en paracaídas cinco toneladas de armas y municiones a los Comités de Coordinación Local (milicias kurdas) en la vecindad de Sheij Masud, en Alepo, al norte de Siria.

Aviones rusos han lanzado en paracaídas cinco toneladas de armas y municiones a los Comités de Coordinación Local (milicias kurdas) en la vecindad de Sheij Masud, en Alepo, al norte de Siria. Los Comités señalaron que el proceso se inició a las tres de la mañana del martes.

Los combatientes kurdos han estado combatiendo a varios grupos terroristas como el Frente al Nusra, Ahrar al Sham, el Ejército Sirio Libre y otros en la ciudad de Alepo y otras partes de la provincia.

Los Comités han acusado a Turquía de apoyar al Frente al Nusra y “otros grupos similares” con el fin de implementar su sueño de crear una zona colchón en el norte de Siria que sirva como refugio y santuario para estos terroristas.

Al mismo tiempo, la aviación rusa ha llevado a cabo una decena de ataques aéreos contra posiciones del Frente al Nusra y Ahrar al Sham, incluyendo por primera vez algunas que se encuentran en Sheij Masud.

Según AFP, que toma siempre como fuente al Observatorio Sirio pro Derechos Humanos, con sede en Londres, decenas de terroristas murieron en los combates contra los comités kurdos en Alepo.

Según el OSDH, 15 terroristas del Frente al Nusra, la rama siria de Al Qaida, murieron sólo el domingo en los enfrentamientos ocurridos en Alepo.

Las fuerzas kurdas han acusado a Turquía de apoyar al Frente al Nusra militar y financieramente. Turquía ha indicado en varias ocasiones que no permitirá el establecimiento de una región autónoma kurda en su frontera y ha advertido a EEUU en contra de cualquier apoyo a los kurdos.

El apoyo ruso a los comités populares en Alepo y a otras fuerzas kurdas en Siria, como las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG), irritarán ciertamente a Turquía, que ha estado luchando contra estas fuerzas por medio de los grupos terroristas a los que patrocina.

Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, señaló el jueves durante un encuentro con su homólogo serbio, Ivica Dacic, en Belgrado que las fuerzas kurdas podrían servir para cerrar la frontera entre Siria y Turquía, lo cual es una prioridad para impedir el flujo de terroristas y armas y el tráfico de petróleo.

Él dijo que Rusia no se opone a que las fuerzas especiales de EEUU participen en el cierre de la frontera, pero añadió que este proceso debe de estar coordinado por Damasco. “Washington afirma que sus tropas pueden ser usadas en Siria, pero yo estoy convencido de que esto sólo puede tener lugar con el consentimiento del gobierno sirio”, subrayó Lavrov.